La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo en Nicaragua prohibió las procesiones que en los próximos días se iban a realizar por San Miguel Arcángel y San Jerónimo en la localidad de Masaya, escenario de masacres perpetradas por la policía afín al régimen.
"La Arquidiócesis de Managua comunica que la Policía Nacional de la ciudad de Masaya ha informado a las Cofradías y Párrocos de las Parroquias de San Miguel Arcángel y San Jerónimo, que por razones de seguridad pública no estarán permitidas las procesiones en las festividades respectivas de esa ciudad", indica un comunicado publicado el 17 de septiembre.
En su comunicado, la Arquidiócesis de Managua invita "a los devotos y promesantes de los santos patronos, a tener presente que la fe y devoción son un tesoro que llevamos en el corazón y desde ahí podemos dar el homenaje debido con la fuerza de esa herencia ancestral en nuestras comunidades".