El diario de circulación nacional, The Australian, dedicó una reciente nota editorial a alabar al Arzobispo de Sydney, Cardenal George Pell, y al Arzobispo de Perth, Mons. Barry Hickey, por mantenerse firmes en su defensa de la vida en sus primeras etapas y en su condena de la ley recientemente aprobada por los diputados de New South Wales, que permitirá, entre otras cosas, generar embriones humanos con tejidos animales.
En su editorial titulado "Un hombre de principios: Tres hurras para un hombre preparado para defender absolutos morales" y publicado el 8 de junio, The Australian destaca que el Cardenal Pell le ha recordado a todos que "la Iglesia Católica se opone a la destrucción de la vida humana y nunca apoyaría la destrucción de embriones humanos para la investigación de células estaminales, incluso si el resultado de ésta fuera la cura para la más devastadora de todas las enfermedades de nuestros tiempos".
"Aquí en The Australian, admiramos al hombre aunque siempre hayamos apoyado la investigación de células estaminales. Pell cree en una verdad eterna y la vida después de la muerte", prosigue el editorial y afirma que "es maravilloso, que en una era en el que el concepto de la verdad cognoscible ha sido rechazado por los eruditos en favor de la relevancia universal, encontremos a un gran intelectual que defiende la ‘verdad eterna’".