El Arzobispo de Córdoba, Mons. Carlos Ñáñez, señaló que los sacerdotes deben vivir el momento histórico que les toca vivir, teniendo presente que el diálogo con la cultura debe ser respetuoso sin renunciar o rebajar los propios principios.
"En todo este proceso de diálogo con la cultura es decisivo ser respetuosos y caritativos con las búsquedas que se dan en el seno de la comunidad eclesial y presbiteral, evitando simplificaciones, caricaturizaciones, descalificaciones, rigideces e intransigencias en nuestras afirmaciones y actitudes", indicó el Prelado.
Sin embargo, aclaró que "todo ello no significa renegar ni rebajar -licuar- las propias convicciones, sino más bien profundizar y elaborar adecuadamente los argumentos que nos permiten asumirlas y sostenerlas, exponiéndolos con respeto y mansedumbre, como recomienda el apóstol san Pedro, y de esa manera contribuir a la búsqueda de la verdad".