2 de noviembre de 2019 / 12:30 PM
En el día de la conmemoración de todos los fieles difuntos, el Papa Francisco celebró la Eucaristía en las catacumbas de Priscila de Roma, en donde explicó las tres características que tiene un verdadero cristiano, las cuales pueden ser más notorias cuando es objeto de persecución.
Al inicio de su homilía, el Santo Padre confió que era la primera vez en su vida que visitaba una catacumba y animó a pensar en aquellas personas "que tenían que esconderse, que tenían esta cultura de enterrar allí a los muertos y celebrar la Eucaristía allí adentro".
Un momento de la historia que calificó el Pontífice como "feo, pero que no ha sido superado", porque en la actualidad también "hay tantas catacumbas en tantos países donde deben fingir hacer una fiesta o un cumpleaños para celebrar la Eucaristía, porque está prohibido en ese lugar".