El Papa Benedicto XVI llegó esta mañana a Nazaret donde celebró una Misa en el Monte del Precipicio. En su homilía recordó el testimonio de la Sagrada Familia y pidió a la humanidad reapropiarse de la verdad fundamental de la familia basada en el matrimonio entre un hombre y una mujer.
En la Eucaristía, el Santo Padre clausuró el Año de la Familia organizado por la Iglesia Católica en Tierra Santa, y afirmó que siguiendo el ejemplo de María, José y Jesús "podemos apreciar todavía más la santidad de la familia que, en el plan de Dios, se basa en la fidelidad para toda la vida de un hombre y una mujer, consagrada por el pacto conyugal y abierta al don de Dios de nuevas vidas".
"¡Cómo necesitan los hombres y mujeres de nuestro tiempo reapropiarse de esta verdad fundamental, que es el fundamento de la sociedad, y qué importante es el testimonio de las parejas casadas para la formación de conciencias maduras y para la construcción de la civilización del amor", indicó.