5 de diciembre de 2006 / 06:41 AM
El Arzobispo de México, Cardenal Norberto Rivera Carrera, señaló que el desarrollo del país no es labor exclusiva de los gobernantes, sino que es una tarea en que la debe involucrarse toda la población.
“No puede ser que el Presidente de la República, solo, con su varita mágica, venga a transformar las realidades: necesita de todos. El proyecto de México se hace solamente cuando hay contribución de todos los mexicanos”, expresó el Purpurado al término de la Misa dominical.
El Arzobispo explicó que consolidar la democracia es un proceso largo “que nunca se alcanza”, por lo que “siempre hay que estar construyéndola”. “Por supuesto, el nuevo Gobierno se ha mostrado muy propositivo, incluyente y muy abierto a las distintas formas de pensar para que todos nos enriquezcamos en este país”.