Derecho a la libertad religiosa es fundamento de los demás derechos, dice Obispo mexicano

En una reflexión sobre el mensaje del Papa Benedicto XVI por la Jornada Mundial de la Paz, Mons. José Martín Rábago, manifestó que el derecho a la libertad religiosa es el fundamento y soporte de todos los demás derechos que necesita una sociedad para vivir en justicia.

En el artículo publicado el 6 de enero en el sitio web de la Conferencia Episcopal de México, Mons. Martín Rábago sostuvo que sin la libertad religiosa "no se puede generar una sociedad justa y consiguientemente se hace imposible el establecimiento de una paz auténtica y estable para toda la familia humana".

Al recordar el mensaje del Papa titulado "La Libertad Religiosa, Camino para la Paz", el obispo se refirió a la necesidad de una libertad de enseñanza que "tiene como sujeto a los padres de familia en orden a decidir la educación que prefieren para sus hijos, aún dentro de la escuela pública".

"La imposición de la educación religiosa por parte de cualquier iglesia o la educación antirreligiosa, directa o indirectamente, por parte del Estado, serían verdaderas injusticias en contra de la libertad religiosa".

El prelado explicó que con estas afirmaciones no se pretende establecer un estado confesional, sino más bien se busca fundamentar la dimensión pública de la religión, respetando la laicidad positiva de las instituciones estatales.

Por este motivo consideró imprescindible que el estado democrático ponga a disposición de los ciudadanos los medios necesarios para el ejercicio de sus creencias religiosas.

"Por eso el estado debe mostrarse más que tolerante, acogedor. En los estados modernos ninguna confesión religiosa tiene el carácter de religión de Estado; la neutralidad no impide, sin embargo, la cooperación. Los funcionarios públicos deben ejercer su derecho a la libertad religiosa expresando sus propias convicciones religiosas".

El obispo destacó la actualidad del mensaje del Papa especialmente en la situación de violencia que vive México y señaló que la construcción de la paz "requiere el reconocimiento y respeto de los derechos humanos de cada ciudadano y el compromiso por parte del Estado de crear las condiciones adecuadas para su recto ejercicio".

"En el momento de grave violencia que vivimos en nuestro país, el clamor generalizado es la búsqueda de la paz. No debemos confundirnos en los caminos que nos conducirán a una paz auténtica", concluyó.