En España y América comenzaron esta semana los actos conmemorativos del centenario de la muerte del Cardenal Ciriaco María Sancha, Arzobispo de Toledo, fundador de tres familias religiosas y valiente defensor del sacerdocio ante los embates del anticlericalismo de su época.
El actual Arzobispo de Toledo, Cardenal Antonio Cañizares, presidió la apertura de los actos conmemorativos en su arquidiócesis y destacó cómo el Siervo de Dios "supo hacer frente a la ola de anticlericalismo que algunos gobiernos desataron en la legislación y en la calle".
Tras expresar su deseo de que pronto alcance los altares, el Purpurado destacó el amor del Cardenal Sancha a la Iglesia, "que le llevó a estar muy atento a los ataques del laicismo militante", también valoró su "delicado sentido de comunión eclesial" por el cual "libró a la Iglesia española, en la bisagra del siglo XIX y XX, de derivas cismáticas muy peligrosas", desviviéndose "por la unidad de los católicos en los momentos cruciales para la historia de España".