En medio de un ambiente de dolor y con una fuerte esperanza por lograr la paz, originado por los enfrentamientos en la Franja de Gaza, los cristianos en Belén celebraron la Solemnidad de la Epifanía del Señor en la Basílica de la Natividad.
Según informa L'Osservatore Romano (LOR), el Custodio de Tierra Santa, el Padre franciscano Pierbattista Pizzaballa, proveniente de Jerusalén junto a un grupo de fieles, "ha sido saludado en su camino hacia Belén, como de costumbre, por palestinos e israelíes, pero esta vez en medio del silencio. Incluso los scouts han evitado desfilar en cortejo en signo de respeto por la ciudad de Gaza, desde hace días asediada por continuos ataques militares".
Luego del Te Deum, el Párroco de la Iglesia de Santa Catalina, el franciscano Samuel Fahim, dijo a la asamblea que "lo que está sucediendo en estos días en nuestra región es muy triste y nos hace palpar lo que está escrito en el Evangelio, cuando tantos niños inocentes son masacrados. Pero como en aquel tiempo Jesús estaba en medio de ellos, Él también está hoy. Por este motivo volvemos a Él, suplicándole transformar nuestra tristeza en alegría y la guerra en paz. Y con este espíritu queremos vivir la fiesta de la Epifanía".