25 de octubre de 2004 / 03:30 PM
Un sacerdote de Líbano declaró que luego de 15 años de ocupación siria, los cristianos en su país siguen depositando todas sus esperanzas en la Iglesia.
El sacerdote maronita Samer Nassif, que actualmente trabaja en Francia, declaró en la sede la organización Ayuda a la Iglesia que Sufre (AIS) que “con la desastrosa situación económica, el desemplo y la falta de respeto por los derechos humanos, sigue la emigración masiva del país. Se estima que cada año unos 20 ó 30 mil libaneses dejan el país y la mayoría son cristianos”.
Según el sacerdote, actualmente entre 12 y 15 millones de libaneses viven en el extranjero, y en el país permanecen solo 4, 2 millones de habitantes.