El Arzobispo de Valencia, Mons. Agustín García-Gasco, afirmó que después de dos mil años, Europa es un significativo ejemplo de la fecundidad espiritual del Cristianismo y éste no puede ser relegado a la esfera de lo privado.
“Tras dos milenios, Europa ofrece un ejemplo muy significativo de la fecundidad espiritual del cristianismo, que por su propia naturaleza no puede ser relegado a la esfera privada", señaló el Arzobispo en su última carta pastoral.
El Cristianismo "tiene vocación de profesión pública y de presencia activa en todos los ámbitos de la vida", aseveró el Prelado, que considera que si en Europa "se impidiera al sustrato religioso y cristiano ejercer su papel de inspirar la ética y su dimensión social, no sólo se negaría toda la herencia del pasado, sino que incluso se pondría en tela de juicio el porvenir del hombre europeo, creyente o no".