Tras la reciente muerte de Ruth Bader Ginsburg, jueza de la Corte Suprema de Estados Unidos e ícono feminista pro aborto, una reconocida analista advirtió que hay sectores, entre ellos en el mundo de la prensa, que quisieran que su sucesora en el máximo tribunal estadounidense tenga un perfil similar y no alguien provida.
En su artículo titulado "La notoria RBG y el Factor 'Cool'", Carrie Gress, doctora en Filosofía por la Catholic University of America, subrayó que lejos de un pensamiento independiente su formación intelectual "se basó en dos mentiras del feminismo radical que han esclavizado tercamente nuestra cultura".
"La primera es que, para que las mujeres tengan igualdad, deben ser exactamente como los hombres, mientras que los hombres deben parecerse más a las mujeres. Y la segunda es que nuestros hijos son un obstáculo para lograr nuestra igualdad y, por tanto, nuestro éxito y felicidad", señaló Gress.