Al presidir el rezo del Ángelus dominical en el Palacio Apostólico de Castel Gandolfo, el Papa Benedicto XVI alentó a los fieles a corregir siempre con amor, invitando al prójimo que ha cometido una falta a volver al buen camino.
Ante miles de fieles llegados de distintas partes del mundo para la oración mariana, el Santo Padre explicó la centralidad de la caridad fraterna que brota de Dios Amor y recordó que esta exigencia se resume en: "Amarás a tu prójimo como a ti mismo".
Benedicto XVI dijo que el Evangelio de hoy, tomado del capítulo 18 de Mateo, "nos dice que el amor fraterno comporta también un sentido de responsabilidad recíproca, por lo que, si mi hermano comete una culpa contra mí, yo debo ser caritativo con él y, ante todo, hablarle personalmente, haciéndole presente que lo que ha dicho o hecho no es bueno".