7 de diciembre de 2005 / 02:29 AM
El Padre Thomas J. Euteneuer, Presidente de la organización Vida Humana Internacional (VHI), recordó que “los actos homosexuales son un pecado grave que pone en peligro el alma de quien los comete y que anulan la capacidad de un hombre para servir competentemente como sacerdote”.
Ante el reciente documento de la Santa Sede en el que se impide el acceso a los homosexuales a los seminarios y a las Órdenes Sagradas, el P. Euteneuer recordó que el texto “cuenta con la aprobación del Papa Benedicto XVI y recuerda la enseñanza de la Iglesia que establece que los hombres que luchan contra sus pasiones desordenadas o llevan la pesada carga de la homosexualidad no pueden ser admitidos al sacerdocio”. “Estamos agradecidos al Vaticano por este documento”, precisó.
"La Iglesia reconoce que los varones con ‘tendencias homosexuales’ pueden ser buenos cristianos, trabajadores sociales y administradores, pero ser sacerdote conlleva un poco de todo esto y mucho más”, prosiguió.