Congresista peruana reclama a funcionario de la ONU por excesivos fondos a feministas

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La presencia del relator de la ONU en Derechos Humanos, Paul Hunt, en el Parlamento nacional fue ocasión para que una tenaz parlamentaria demandara a las Naciones Unidas que sus fondos se empleen en asistir a los más necesitados en vez de financiar lobbys feministas.

De gira por América Latina, Hunt llegó al Parlamento para impulsar los nuevos conceptos de salud de la Organización Mundial de la Salud y las famosas políticas de salud reproductiva, que bajo eufemismos incluyen el aborto legal.

En la cita, la congresista Elvira de La Puente del APRA, expuso a Hunt las cifras de las personas con discapacidad física y mental en el Perú, los presupuestos exiguos destinados a ellos por el gobierno peruano, así como la gran necesidad de medicinas, atención, prevención y educación en esa área especifica.

De La Puente citó tres decretos supremos del año 2002 firmados por el Ministerio de Relaciones Exteriores en los que el Fondo de Población de la ONU (UNFPA) financia con miles de dólares a instituciones feministas radicales como Manuela Ramos y Flora Tristán “para promover entre otras cosas ‘métodos definitivos’” y les otorga una serie de atribuciones para “vigilar los supuestos derechos sexuales y reproductivos sobre autoridades de gobierno e incluso congresistas”.

La parlamentaria agregó que en estos convenios “hay partidas para que estas organizaciones feministas organicen almuerzos, reuniones y artículos de prensa para hacer que el gobierno implemente una política de salud reproductiva”. 

“Ojalá fuesen métodos para informar a lo adolescentes. No es eso. No se detienen allí. Van más allá. Son ‘profesionales’ que inciden en la esterilización y en los métodos anticonceptivos definitivos”, denunció.

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De La Puente señaló que “en lugar de financiar a grupos feministas de ideología ya conocida y que promueven la esterilización y ‘el aborto seguro’”,  los fondos deberían dirigirse a necesidades prioritarias reales.

“Quizás debería haber alguna forma de sugerir a las Naciones Unidas que esos millones de dólares que nos están aportando fueran dirigidos a los sectores que realmente están necesitados” y requieren ayuda de emergencia, señaló la parlamentaria.

El representante de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en el Perú, Manuel Peña, que acompañó a Hunt, quiso detener a la congresista alegando que la ONU promueve con esos fondos “una política de salud reproductiva” para frenar el 20 por ciento de embarazos adolescentes que actualmente ostenta el Perú.

La respuesta de la parlamentaria fue contundente. Según De La Puente los millones de dólares gastados desde el gobierno de Alberto Fujimori en el tema de “salud sexual y reproductiva” se usaron para promover métodos anticonceptivos.

“Y a pesar de haberse incluso aplicado métodos irreversibles como la ligadura de trompas y esterilizaciones en hombres, ha seguido el crecimiento del porcentaje de madres adolescentes”, precisó la parlamentaria.

Según De La Puente, lo preocupante es justamente que estas políticas y los millones de dólares invertidos “no han logrado bajar este porcentaje de madres adolescentes”.

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La congresista denunció que el problema radica en que estos programas quieren frenar embarazos en curso promoviendo la legalización del “aborto seguro” y no invierten “en educación, en la formación de las capacidades intelectuales de los adolescentes, para que puedan manejar su vida sexual” adecuadamente y no sostengan relaciones precoces.

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