19 de diciembre de 2014 / 12:38 PM
El Comité Olímpico Nacional Italiano (CONI) celebra su centenario. Esta mañana cinco mil directivos y atletas de ese ente han asistido a una misa en la basílica de San Pedro al final de la cual el Santo Padre los ha encontrado y dirigido un breve discurso, en el que dijo que la fatiga y el sacrificio del deporte, también deben vivirse para lograr las metas importantes de la vida.
El Santo Padre se refirió a los principios de la Carta Olímpica, "que coloca entre sus objetivos principales la centralidad de la persona y su desarrollo armonioso, la dignidad humana, además del de contribuir a la construcción de un mundo mejor y más pacífico, educando a la juventud a través del deporte practicado sin discriminación de ninguna clase y dentro del espíritu... que exige comprensión mutua, espíritu de amistad, solidaridad y juego limpio''.
''Desde siempre el deporte ha favorecido una universalidad caracterizada por la fraternidad y la amistad entre los pueblos, de concordia y paz entre las naciones, de respeto, tolerancia y armonía de las diferencias. Todo acontecimiento deportivo, sobre todo las olimpíadas, donde se confrontan representantes de naciones con historias, culturas, tradiciones, credos y valores diversos, puede convertirse en una fuerza ideal capaz de abrir nuevos caminos, a veces inesperados, para superar conflictos causados por la violación de los derechos humanos''.