CEM pide "convicciones profundas" para enfrentar delincuencia en México

La Oficina de Prensa de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) aseguró que además de reforzar las medidas de prevención, la sociedad debe recurrir a sus "convicciones profundas" para enfrentar la ola delictiva que afecta al país.

"Sin negar la importancia de las medidas en la prevención del delito y cumplimiento de la ley, la solución radica en convicciones profundas, que están ‘en el corazón del mismo hombre’, y en la creación de las condiciones indispensables para el bien integral de la sociedad", indica la CEM en una nota editorial publicada en su sitio web.

En este sentido, lamenta que a pesar de las manifestaciones multitudinarias de la población por la paz, "por desgracia, los asaltos, los secuestros y asesinatos, siguen lesionando gravemente a la sociedad mexicana, violando el derecho de todos a vivir en paz. El narcotráfico y el crimen organizado han penetrado en numerosos ambientes institucionales, destruyendo con ello su credibilidad y eficacia".

El texto sostiene que "hoy más que nunca, es imposible negar el incremento del desorden social y la inseguridad, por la falta de observancia del estado de derecho".

"Lamentablemente, los esfuerzos realizados hasta el momento, por quienes tienen la obligación de brindar protección a la sociedad y de detener esta situación, aunque meritorios, no han arrojado los resultados esperados. Por lo que es necesario, no sólo hablar de buenos deseos, sino luchar por poner en práctica y hacer realidad los compromisos que delante de la sociedad se firmaron, con los 75 puntos del acuerdo para la seguridad nacional", indica.

"Pero, ¿cómo lograr esto?, si algunos de nuestros representantes en la asamblea y en los poderes de la unión, se empeñan en erigirse como ‘jueces’ de los demás, tachando a quienes piensan distinto a ellos, como ‘oscurantistas’, ‘retrógrados’, ‘misóginos’ y ‘antimodernistas’", denuncia.

Finalmente, recuerda que "autoridad pública es, ante todo, autoridad moral y, aunque constituida legítimamente, necesita validarse mediante el servicio a la sociedad, velando por el cumplimiento del derecho, el respeto a la vida y la construcción de la justicia".