15 de julio de 2006 / 06:04 PM
En su reflexión semanal en el programa "Claves para un Mundo Mejor", el Arzobispo de La Plata, Mons. Héctor Aguer, se refirió hoy a las razones por las cuales la Iglesia Católica sostiene el celibato sacerdotal asegurando que ésta considera se trata de “un tesoro preciosísimo del cual no se debe renunciar".
El Prelado recordó "que la disciplina del celibato está ligada obligatoriamente al ministerio sacerdotal por una decisión de la Iglesia latina pero que es perfectamente libre. La persona que se empeña en ese camino ha tenido años y años de preparación para reflexionar y cuando llega a comprometerse definitivamente, de por vida, ya tiene la suficiente madurez para hacerlo de modo consciente".
"Suele decirse que el celibato es obligatorio como si la persona que elige ese camino fuera forzada en contra de sus intenciones o de la intenciones más profundas de su personalidad y no es así", señaló. "¡Es que el mundo de hoy no comprende la posibilidad de entregarse libremente al servicio de Dios en cuerpo y alma de una manera total!".