7 de mayo de 2010 / 02:24 AM
El Presidente de la Conferencia Episcopal de Bélgica (CEB) y Arzobispo de Bruselas, Mons. André-Mutien Joseph Léonard, explicó que si bien los abusos sexuales cometidos contra menores por parte de miembros del clero son crímenes deplorables que hieren profundamente, no se puede culpar por estos al celibato, ya que éste "no es fuente de desequilibrio para el sacerdote, sino que es fuente de gracia".
En entrevista concedida a L’Osservatore Romano, el también Primado de Bélgica comentó que buscar las causas de estos crímenes "siempre es difícil. Sin embargo, estoy convencido de que no es correcto dirigir estos acontecimientos desviados hacia el celibato de los sacerdotes".
"Sobre todo –continuó– porque cada uno de nosotros sabe bien que los abusos sexuales contra menores suceden principalmente entre las paredes domésticas, en la familia. Credo que a nadie se le puede ocurrir, por ello, acusar al matrimonio como una fuente de desequilibrio mental para estos actos".