El sábado 19 de febrero cientos de católicos se congregaron en el atrio de la Catedral de Lima (Perú) para rezar un Rosario por la paz, ante la provocación "Besos contra la homofobia" en el que un reducido grupo de gays y lesbianas se besaron en la Plaza Mayor ubicada frente al templo principal del Perú.
Los homosexuales habían convocado a la repetición de este evento realizado originalmente el sábado 12 de febrero en el que fueron desalojados por la policía tras besarse en las escalinatas de la Catedral.
Para esta segunda edición, contaron con el apoyo explícito de la alcaldesa de Lima, Susana Villarán, que en diversas ocasiones ha expresado su postura favorable a las uniones homosexuales.