El Cardenal Giovanni Battista Re, prefecto para la Congregación de los Obispos y Presidente de la Pontificia Comisión para América Latina, aseguró desde esta ciudad que la fe y no los bienes materiales, es la mayor herencia que unos padres pueden dejar a sus hijos.
Al concluir el Congreso Teológico Pastoral que formó parte del V Encuentro Mundial de las Familias, con una Misa concelebrada por dos mil obispos, el Purpurado explicó que “unos padres pueden dejar en herencia pocas cosas, pero si les transmiten la fe a los hijos les estarán dando el bien más precioso que existe”.
Según informa la agencia AVAN, el Cardenal Re aseguró que “lo que se siembra en el corazón de un niño dará frutos en un futuro” y son muchos los padres que “profundizan en la fe gracias a sus hijos, en los que ven los valores del Evangelio”.