El Cardenal Francisco Javier Errázuriz, Arzobispo de Santiago, pidió que la Asamblea Eclesial que congrega a más de 500 personas venidas de todos los rincones del país, sea durante estos días un “nuevo Pentecostés”.
Durante la Misa que presidió este miércoles en el Santuario de Schoenstatt, concelebrada por el Nuncio Apostólico de Su Santidad, Mons. Aldo Cavalli; por más de 30 obispos y un centenar de sacerdotes, el Cardenal Errázuriz se refirió a la experiencia que vivieron los discípulos en las vísperas de Pentecostés.
“A pesar de esa diversidad, de su distinta procedencia, medio social, cultural, de la región de la cual venían, estaban profundamente unidos porque el Señor los había llamado”; dijo el Arzobispo, y señaló que “yo creo que algo semejante podemos decir de nosotros. Venimos de distintas regiones, somos muy diferentes unos de otros, seguramente tenemos distintas experiencias. Nos une profundamente que Jesucristo nos haya llamado por el nombre, que nos haya dicho ‘sígueme’, nos une profundamente que nos haya llamado a construir juntos la Iglesia y a realizar la misión de la Iglesia en el mundo transformando las realidades seculares según el espíritu de nuestro Señor”.