Pese a las persistentes restricciones del Gobierno, el Cardenal Jaime Ortega y Alamino, Arzobispo de La Habana, manifestó su optimismo ante el futuro de la Iglesia en Cuba debido al incremento de vocaciones sacerdotales y nuevos bautizados.
“En la Iglesia siempre hay una presencia joven, que no es extraordinaria, pero que es una juventud muy interesada, deseosa de formación cristiana”, explicó el Purpurado durante su reciente visita a Los Ángeles para reunirse con los obispos de Estados Unidos en su asamblea anual, luego de la cual fue entrevistado por The Tidings, el diario diocesano de Los Ángeles, y la publicación Vida Nueva.
“Todos los años en Semana Santa bautizamos a muchos adultos, la mayoría de los cuales son menores de 35 años. En la Arquidiócesis de La Habana bautizamos entre mil y mil 200 personas cada año; luego de pasar por una preparación de un año. Estos nuevos miembros llegan a la Iglesia con una decisión consciente y un deseo de crecer en su vida cristiana”, explicó el Cardenal Ortega.