El Arzobispo de Lima (Perú), Cardenal Juan Luis Cipriani, señaló que el Perú es una nación pacífica y mayoritariamente católica a la que no se le debe envenenar "con ideologías de pequeños grupos que pretenden distorsionar el matrimonio entre un hombre con una mujer, el derecho a la vida desde su concepción y el derecho a una familia".
"Jesús, ilumina a quienes tienen el pesado trabajo de conducir a los pueblos, no hay excusas para la violencia, la violencia nunca es camino hacia nada, la mentira nunca es camino hacia nada. Tenemos urgencias muy grandes en el campo de la educación y en el campo de la familia. No es el momento de estar abriendo nuevas heridas ni de tipo moral ni de tipo material", añadió durante la celebración del Corpus Christi en la catedral de Lima.
Ante los miles de fieles reunidos el domingo, el Cardenal rechazó el aborto y elevó sus plegarias a la Virgen María para que cuide "a esas criaturas en el vientre de sus madres".