4 de octubre de 2010 / 03:43 PM
En la Misa central de la multitudinaria peregrinación al Santuario de la Virgen de Luján este fin de semana en Argentina, el Arzobispo de Buenos Aires, Cardenal Jorge Mario Bergoglio pidió a la Madre de Dios una patria "sin odios ni rencores", que en el Bicentenario de la independencia "el odio no eche raíces en nuestro corazón".
Ante cientos de miles de fieles presentes que caminaron 58 kilómetros, el Cardenal se dirigió a la Virgen María a quien pidió "una patria para todos. Que todos tengan cabida, que no haya sobrantes, excluidos ni explotados. Que esta patria para todos nos consolide como hermanos en la herencia patriótica de nuestros mayores. Que nadie sea despreciado. Que no crezca el odio entre nosotros. Que el rencor, ese fruto amargo que mata, no eche raíces en nuestro corazón".
Seguidamente pidió a los jóvenes a que "nada y nadie los confunda" y los alentó a dejarse "cuidar" por la Virgen. Tras insistir en pedirle a la Virgen "una patria renovada en la fraternidad", convocó a repetir tres veces el lema de la de la 36 peregrinación a pie a Luján: "Madre, queremos una patria para todos".