Para superar la crisis de valores que atraviesa España, el país necesita de laicos comprometidos que sirvan a la verdad y la vida. Ésta es la fórmula propuesta por el Cardenal Jozef Tomko, Presidente del Comité Pontificio para los Congresos Eucarísticos Internacionales, de visita en el país.
El Purpurado ofreció la lección inaugural en la apertura del curso 2005-2006 de la Universidad Católica San Antonio de Murcia (UCAM). En su discurso, precisó que España es un país “tradicionalmente católico que hoy ve cómo en su vida pública se pone en crisis valores que tocan profundamente el concepto mismo de la persona”. Ante esta situación los creyentes “no pueden permanecer pasivos”, agregó.
Según el Cardenal Tomko, “cuando están en juego los valores humanos de la libertad, de la convivencia, del respeto de los derechos inalienables, los valores de la familia, de la recta educación, si no hay un testimonio iluminado y valiente que se trasmite de manera adecuada incluso a través de los medios de comunicación social, se corre el riesgo de provocar una catástrofe antropológica, como ya ha sucedido en otros lugares y en otros sistemas políticos del siglo XX”.