Card. Sterzinsky: No es posible "amar" para "probar"

El Arzobispo de Berlín, Cardenal Georg Sterzinsky, concedió una entrevista al periódico “Neuen Bildpost”, en la que señaló que en la sexualidad humana, tanto en el matrimonio como el celibato, “no se puede amar por probar”.

En referencia a las relaciones sexuales, afirmó que “aún contra el espíritu mundano y una ampliamente difundida praxis, la Iglesia debe mantener con firmeza, que las relaciones sexuales están reservadas al matrimonio”

“Hoy en día –continuó el Purpurado– se torna complicado hacer comprender todas las implicancias de las relaciones sexuales y al mismo tiempo afirmar con convicción que las relaciones pre-matrimoniales no convienen a la naturaleza del hombre”.

El Cardenal Sterzinsky, que es Presidente de la Comisión para el matrimonio y la familia de la Conferencia Epsicopal Alemana, recordó que “la visión de fe de la Iglesia no desvaloriza la unión sexual, sino por el contrario, la valoriza altamente”.

“Por su propia naturaleza, esta unión sexual, es expresión del mayor amor que se puede entregar y de la más profunda unidad físico-espiritual. Por ello no es posible ‘amar por probar’ ni aspirar a una unidad físico-espiritual ‘sólo por probar’. Tampoco es posible ofrecer un amor tal a una pareja cambiante. ‘Cada quien se torna responsable por aquel con quien se ha familiarizado’, de ahí que sólo sea posible el pleno compromiso con alguien por quien se ha asumido responsabilidad”, indicó.

Sobre el divorcio, el Cardenal precisó que la permanencia del vínculo matrimonial hasta la muerte del cónyuge “no lo determina la Iglesia, sino que viene dispuesto por Dios, por lo que la Iglesia no puede abolir la indisolubilidad del matrimonio, ni siquiera por compasión con los prójimos que puedan estar sufriendo en su matrimonio, justamente por la comprensión que tiene del mismo. A ellos, la Iglesia les recuerda siempre, que el matrimonio permanece bajo la bendición de Dios y que a cada cónyuge que se esfuerce siempre por vivir el amor de autodonación, le es dado como gracia la fuerza para permanecer fiel al otro”.

la especial valorización del celibato no es resultado de desvalorizar o de despreciar lo corporal cada una una vocación específica