Durante su visita a esta ciudad, en el marco de la Misa en conmemoración del retorno de las reliquias de San Liborio a la catedral de Paderborn, el Arzobispo y Vicario General para la Diócesis de Roma, Cardenal Camillo Ruini, señaló que “ningún cristiano debe eximirse de llevar el misterio de salvación a los hombres.”
Al inicio de la celebración, el Arzobispo de Paderborn, Mons. Hans-Josef Becker, dio una calurosa bienvenida al Purpurado, secundada por fuertes aplausos de los asistentes que llenaban el templo.
Durante la prédica, el Cardenal Ruini señaló que la diócesis de Roma se sentía profundamente agradecida y en deuda con esta ciudad, que por iniciativa del fallecido Cardenal Degenhardt, recordado Arzobispo de Paderborn, había colaborado para la construcción del templo de la nueva parroquia de San Liborio en Roma en noviembre de 1998.