El Presidente de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI), Cardenal Camillo Ruini, afirmó que “la Iglesia Católica trabaja para la defensa de la persona y esto no se puede considerar una injerencia en el Estado”, durante su discurso inaugural de la Asamblea Plenaria de los obispos de Italia.
Según informa Europa Press, el Purpurado señaló que “la profunda unión” entre Estado e Iglesia está basada en la oportunidad que se da a la comunidad cristiana de poder desarrollar su misión.
“Nosotros trabajamos por el interés católico pero siempre para el hombre, criatura de Dios, por lo que podemos decir con serenidad y sin espíritu polémico, a los que temen o se quejan de una excesiva presencia de la Iglesia en la vida pública italiana, que queremos crear unión y no divisiones”, indicó el Cardenal.