Con ocasión de la presentación del nuevo rector del Pontificio Colegio Norteamericano en Roma, el Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Cardenal William Levada, explicó las razones de la no admisión de homosexuales al sacerdocio y señaló como una de ellas que “el reconocimiento público de la homosexualidad coloca al sacerdote en conflicto con el carácter esponsal del amor”.
“Un sacerdote con abiertas manifestaciones de homosexualidad hace más difícil a los fieles reconocerlo como representante de Cristo. Asimismo, el reconocimiento público de la homosexualidad coloca al sacerdote en conflicto con el carácter esponsal del amor, tal como Dios lo ha mostrado e inscrito en el corazón de la persona humana”, dijo el Purpurado ante 170 seminaristas.
El Cardenal hizo alusión a los nuevos desafíos para los seminarios, entre los que se encuentra la implementación de la Instrucción vaticana sobre la homosexualidad, en relación a aquellos hombres con tendencias homosexuales profundamente enraizadas, quienes no deben ser ordenados sacerdotes.