7 de octubre de 2011 / 12:09 AM
Por onceava vez en aproximadamente una década, el gobierno de Canadá negó el financiamiento a un grupo católico pro-vida que ayuda a madres embarazadas. Al mismo tiempo aprobó darle 6 millones de dólares a la principal trasnacional del aborto en el mundo, la International Planned Parenthood Federation (IPPF).
En declaraciones a ACI Prensa, el Presidente de MaterCare International, Dr. Robert Walley, señaló que "nos dijeron que nunca obtendríamos financiamiento simplemente porque no damos ‘salud reproductiva’, somos ‘demasiado católicos’ y muy cercanos al Papa".
MaterCare International está compuesta por ginecólogos y obstetras que trabajan en todo el mundo asistiendo a embarazadas, especialmente en países desarrollados, en donde las ayudan antes, durante y después del parto.