El Papa Juan Pablo II aceptó las renuncias de Mons. Bonifácio Piccinini, S.D.B., al gobierno pastoral de la Arquidiócesis de Cuiabá, y la de Mons. Manoel Pestana Filho, de la Diócesis de Anápolis.
A Mons. Piccini le sucede Mons. Milton Antonio dos Santos, S.D.B., quien hasta ahora se desempeñaba como coadjutor en la misma sede.
En Anápolis el Santo Padre nombró a Mons. Joao Wilk, O.F.M.Conv., hasta ahora Obispo de Formosa.