4 de mayo de 2005 / 06:56 PM
El 30 de abril fue un día histórico para la familia de Donald Herbert, un ex bombero de Buffalo. Luego de haber permanecido en lo que muchos llamaron un persistente estado vegetativo durante casi diez años... Donald sorprendió a todos cuando comenzó a hablar.
En diciembre de 1995 Herbert ayudaba a controlar las llamas de un incendio y de pronto colapsó el techo bajo el que se encontraba. El accidente le produjo un severo daño cerebral y desde entonces no había sido capaz de mantener una simple conversación y tampoco podía reconocer a sus seres queridos.
El sábado, de la nada, preguntó a la enfermera que lo atendía por su esposa e hijos. Momento después, cuando uno de sus familiares le preguntó como se sentía, respondió que “muy bien”.