El Papa Benedicto XVI sostuvo un encuentro privado de más de 30 minutos con el presidente de México, Felipe Calderón, en el que habrían hablado sobre la violencia, la pobreza y la importancia de velar por valores fundamentales como la vida y la familia.
El encuentro se realizó en la casa del Conde Rul, una de las joyas arquitectónicas de la ciudad de Guanajuato. Fue una reunión a solas donde no se permitió el ingreso de los miembros de las comitivas.
Como se sabe, México afronta actualmente los golpes del narcotráfico y el crimen organizado, que han elevado el número de muertos a causa de la violencia. Ayer en su discurso de bienvenida el Papa afirmó que reza “por los que sufren a causa de antiguas y nuevas rivalidades, resentimientos y formas de violencia”.