El Papa Benedicto XVI manifestó hoy durante la Audiencia General celebrada en la Plaza de San Pedro ante unos 40 mil peregrinos su preocupación por los últimos acontecimientos en Hungría.
Al dirigirse a los presentes provenientes de Budapest y de Nagymácséd, el Santo Padre pidió a Dios "que todas las partes encuentren una solución justa y pacífica".
"Mientras pido la intercesión de la beata Sara Salkaházi, imparto de todo corazón la bendición apostólica", concluyó.