Al término del rezo del Ángelus dominical, el Papa Benedicto XVI instó a la comunidad internacional a velar por el respeto de los derechos humanos de los refugiados, personas que para huir de la violencia se ven obligadas a dejar sus lugares de origen.
El Santo Padre hizo este llamado en el marco del Día Mundial del Refugiado, iniciativa promovida por las Naciones Unidas y que se celebra el 20 de junio "para llamar la atención de la comunidad internacional sobre las condiciones de tantas personas, especialmente de las familias, obligadas a escapar de su tierra y amenazadas por conflictos armados y graves formas de violencia".
"Aseguro a estos hermanas y hermanos, sometidos a duras pruebas, la oración y la solicitud constante de la Santa Sede y espero que sus derechos se respeten siempre y que puedan reunirse pronto con sus seres queridos", expresó el Papa.