El domingo por la tarde, el Papa Benedicto XVI se reunió con los obispos franceses en el Hemiciclo Santa Bernadette de Lourdes, abordó los distintos desafíos que enfrenta la Iglesia en Francia y recordó a los sacerdotes que “su vida espiritual es el fundamento de su vida apostólica”.
El Santo Padre recordó a los pastores que ante los retos planteados en el mundo de hoy, urge impulsar la labor evangelizadora y recordó que “la catequesis no es tanto una cuestión de método, sino de contenido”.
“Una esmerada preparación de los catequistas -continuó- permitirá la transmisión íntegra de la fe, a ejemplo de San Pablo, el más grande catequista de todos los tiempos, al que miramos con admiración particularmente en este segundo milenio de su nacimiento”.