11 de marzo de 2012 / 08:55 AM
El Papa Benedicto XVI hizo un llamado urgente de ayuda para los más de 70 000 damnificados de la isla africana de Madagascar, víctimas de la furia de la tormenta tropical “Irina”.
Tras concluir el rezo del Ángelus, el Santo Padre indicó que su pensamiento se dirige principalmente “a las queridas poblaciones de Madagascar, que recientemente han sido azotadas por violentas calamidades naturales, con graves daños a las personas, a las estructuras y a los cultivos”.