11 de enero de 2006 / 05:45 AM
Durante la tradicional Audiencia General de los miércoles el Papa Benedicto XVI meditó sobre el Salmo 143 y en su catequesis recordó que el Hijo de Dios está con nosotros, y que para el cristiano tiene el rostro amoroso de Jesucristo.
En modo particular invitó a los fieles de lengua española a vivir con alegría y fidelidad los compromisos bautismales. El Santo Padre afirmó ante los miles de files reunidos en el Aula Pablo VI que “justamente como se trata de un Salmo de época sucesiva, es fácil pensar que el rey que es exaltado no tiene las características del soberano davídico, sino que representa la figura luminosa y gloriosa del Mesías, cuya victoria no es más un evento bélico- político, mas una intervención de liberación contra el mal”.
El Santo Padre hizo notar la presencia de “la imagen marcial del Dios que prepara para la lucha a su fiel de modo que sepa así afrontar las hostilidades del ambiente, las potencias oscuras del mundo”.