El Papa Benedicto XVI tuvo un emotivo encuentro con Maria Teresa y Ruggero Badano, los padres de la joven italiana Chiara "Luce" Badano, beatificada el sábado 25 de septiembre.
Al final de la Audiencia General de hoy, los Badano se acercaron al Santo Padre para agradecerle que su única hija haya sido elevada a los altares. A su turno el Pontífice les agradeció a ambos por haber hecho posible el testimonio de vida cristiana de esta muchacha fallecida a los 18 años tras una penosa enfermedad.
Según informa L’Osservatore Romano, los Badano afirmaron que "estamos tocando y contemplando con las manos las maravillas del amor de Dios, sorprendidos de que Él haya elegido a dos pobres personas como nosotros para participar en la contagiosa experiencia cristiana de nuestra única hija".