23 de abril de 2012 / 08:05 PM
El Prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos, Cardenal Ángelo Amato, presidió la ceremonia de beatificación de la Madre María Inés Teresa y afirmó que es el reconocimiento de la Iglesia a una mujer que encarnó las mejores cualidades humanas y espirituales, y un don de Benedicto XVI para México.
Ante las 12.000 personas que llenaron la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe, el Cardenal elevó a los altares a la cuarta mujer mexicana el sábado 21 de abril.
"La beatificación de hoy es otro don que el Santo Padre Benedicto XVI, hace a la Iglesia y a todo el pueblo mexicano. Hace un mes el Papa llegó a esta noble tierra y se sintió feliz de estar entre ustedes. Con esta visita deseaba estrechar la mano a todos los mexicanos, de dentro y de fuera de vuestra tierra, para apoyarles y agradecerles su fidelidad a la fe católica y su amor a Cristo Rey y a la Iglesia", afirmó el Purpurado.