El Ayuntamiento de Esplugues de Llobregat (Barcelona), gobernado por el Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC), ha iniciado las gestiones para expropiar el Monasterio de Santa María de Montsió y desalojar a sus propietarias, una comunidad de religiosas dominicas.

Con la modificación del Plan General Metropolitano y la recalificación de los terrenos, pasándolos de zona verde privada de uso religioso a terrenos de titularidad pública con la zonificación de verde público y equipamiento, el Ayuntamiento pretende apropiarse del conjunto arquitectónico conformado por una iglesia, el claustro gótico del siglo XIV, dependencias y jardines.

El Ayuntamiento fundamenta su decisión argumentando que así se pretende preservar el conjunto patrimonial y garantizar la apertura del mismo a todos los ciudadanos.

Argumentos injustificados

Sin embargo, algunos han cuestionado la pretensión del Ayuntamiento catalán calificándola de injustificada y “arbitraria”, pues el conjunto patrimonial ha sido preservado en perfectas condiciones, desde que fue creado en el siglo XIV hasta hoy, por las distintas comunidades de religiosas que han vivido allí. Gracias a ellas, además, el claustro y los jardines están abiertos a cualquier visitante.

Sin mediar diálogo alguno y a través de una simple carta, el Ayuntamiento informó a la comunidad dominica su decisión de expropiar su antigua propiedad.

El anuncio del Ayuntamiento en su publicación mensual de que en breve el Monasterio será de titularidad pública ha causado indignación entre los habitantes de Esplugues de Llobregat.

La expropiación de su monasterio no sólo obligaría a las religiosas a marcharse de ahí -el Ayuntamiento no ha previsto su reubicación–, sino que también pone en peligro la supervivencia de la Comunidad al privársele de las condiciones básicas para el desarrollo su modo de vida.

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