El Padre Raymond Moussalli, Vicario Patriarcal Caldeo de Jordania, escribió una carta al Nuncio Apostólico en Irak, Mons. Francis Assisi Chullikat, en la que narra las duras condiciones de vida de los refugiados cristianos en Ammán, y en la que pide ayuda para seguir acogiendo y colaborando con esta comunidad.
En declaraciones a la agencia de los obispos italianos SIR, el sacerdote explicó que "nos hemos encontrado hace poco también con el Vicepresidente iraquí, Tarek al-Hashemi, a quien le hemos mostrado lo escrito en la carta, en donde se explica que los cristianos son habitantes originarios y plenos ciudadanos de Irak y el Estado debe por tanto protegerlos. Nosotros queremos convivir pacíficamente con los musulmanes".
El Vicario Patriarcal también solicita la ayuda de la Unión Europea, especialmente de Italia, España y Francia y recuerda que "la comunidad internacional no puede permanecer en silencio ante la masacre de los cristianos en Irak", incrementada el pasado 7 de marzo, día de las elecciones, en la que varias personas de esta comunidad fueron asesinadas.