El Cardenal Leonardo Sandri, Prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, alentó a los católicos de todo el mundo a colaborar material y espiritualmente con los cristianos en Tierra Santa y en Medio Oriente, que con frecuencia sufren la persecución a causa de su fe.
El Purpurado explicó en entrevista concedida a L’Osservatore Romano, que la colecta que la Iglesia en el mundo realiza en Viernes Santo para Tierra Santa, sirve para "la entera comunidad católica, según las normas establecidas por la Santa Sede".
El Cardenal explicó que cuando se refiere a Tierra Santa no se habla solamente de Israel y Palestina sino que comprende también "Jordania, Siria, el Líbano, Egipto, las islas de Chipre y Rodas. Pienso también en Irak, donde se encuentra la antigua Ur, que Abraham dejó siguiendo el mandato de Dios".