Con ocasión del Día Mundial de Lucha Contra el SIDA, el Arzobispo de Cusco y Presidente de la Comisión Episcopal de Familia, Mons. Juan Antonio Ugarte, recordó que las mejores armas contra la difusión de la enfermedad son la castidad y la fidelidad.
El Arzobispo señaló que antes de recurrir a métodos anticonceptivos se debería insistir en la recuperación de valores que permitan a la sociedad librarse de este virus.
“En el mundo hay un intento de controlar ese flagelo con métodos anticonceptivos y con preservativos, pero así no se controla nada. La Iglesia insiste en la importancia de vivir la castidad, que es una virtud que debemos asumir todos”, explicó en declaracions difundidas por la Oficina de Prensa del Episcopado Peruano.