13 de agosto de 2004 / 04:05 PM
A un día de la visita del Papa Juan Pablo II al Santuario de Lourdes, el Arzobispo de Paris, Cardenal Jean-Marie Lustiger, afirmó que junto a los atletas olímpicos que compiten en Atenas, el Santo Padre demuestra que “la dignidad humana no reside en la fuerza física” sino en la espiritual.
“Creo que es estupendo que la visita del Papa se produzca al mismo tiempo que los Juegos” porque el Papa nos “demuestra que la dignidad humana no reside en la fuerza física o en el rendimiento, el dinero o el poder”, afirmó el Cardenal.
Asimismo, el Arzobispo agregó que “durante este agosto de 2004, marcado por tantas tragedias, una gran multitud se reunirá y compartirá un inmenso gesto de esperanza” durante la visita del Papa.