23 de marzo de 2005 / 04:57 PM
El Arzobispo de Denver, Mons. Charles Chaput, emitió una declaración en la que afirma que “los obispos y laicos de Florida tienen la tarea de liderar a los católicos estadounidenses en el caso de Terri Schiavo. Nuestro trabajo, fuera de Florida, es apoyar a la Señora Schiavo y a todos aquellos que están preocupados por su bienestar con nuestras oraciones”.
El Prelado también recordó, en el inicio de Semana Santa, que “al permitir la muerte de la Señora Schiavo por inanición, ‘se estaría dando un grave paso hacia la legalización de la eutanasia en Estados Unidos’”.
Mons. Chaput indicó que “quitarle el agua y la comida a un paciente puede justificarse –en alusión a las enseñanzas de la Iglesia– sólo en el caso de un enfermo terminal y cuando la muerte natural es inminente”. Terri Schiavo no es una enferma terminal, ni se encuentra en coma o en estado vegetativo.