12 de noviembre de 2013 / 05:35 PM
"Es necesaria una mesa de diálogo para frenar la violencia", señaló el Arzobispo de Cali (Colombia), Mons. Darío de Jesús Monsalve, para conversar con los cabecillas de las Bacrim (bandas criminales) y las organizaciones armadas que se apoderan de territorios en las ciudades.
En declaraciones recogidas por el sitio web de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), el Prelado dijo que "esa gente necesita una mesa, no de negociación, sino de diálogo para la rendición, el desmonte de esas estructuras y garantías jurídicas que se les podrían dar a todos, así sean bandidos y delincuentes".
"Se trata de organizaciones que no se terminan porque se detenga o se elimine a un cabecilla", aseguró.