El Arzobispo de La Plata, Mons. Héctor Aguer, exhortó a los feligreses a "registrar la fecha de nuestro propio bautismo y conmemorar, como una fiesta personal, el aniversario, para dar gracias a Dios por habernos hecho cristianos, hijos suyos, miembros de su Iglesia".
En una reciente homilía, el Prelado señaló que "hemos de valorar cada día más el don recibido en el bautismo, por el cual como hijos adoptivos nos asimilamos a la filiación del Hijo Unigénito, y convertidos en templos del Espíritu Santo podemos vivir en la alabanza del Padre y confiarnos a su amor providente, procurando complacerlo en todo".
Tras considerar que "el efecto personalísimo del bautismo en cada uno de nosotros es correlativo, recíproco, al efecto eclesial: el bautismo nos incorpora al Cuerpo de Cristo que es la Iglesia", el Arzobispo de La Plata aseguró que "no estamos solos, no somos cristianos aisladamente, sino como miembros los unos de los otros en la realidad misteriosa de la Iglesia".