Un intento de reforma económica y social con oscuros manejos tiene actualmente en el ojo de la tormenta al Arzobispo de Madrid (España), Cardenal Carlos Osoro, a causa, principalmente, de la persona a la que encomendó dirigir esta labor y que tendrá que enfrentar un juicio por acusaciones como la de estafa y apropiación indebida.
Bajo la gestión de David López Royo, nombrado delegado de Fundaciones en el Arzobispado de Madrid por el Cardenal Osoro desde 2016 hasta 2019, se intentó vender edificios pertenecientes a fundaciones vinculadas a la Iglesia por una suma superior a los 100 millones de euros.
En declaraciones a ACI Prensa, Rodrigo Pinedo, director de Comunicación del Arzobispado de Madrid, precisó que López Royo "ejercía por delegación la autoridad del arzobispo" para las fundaciones.